La verdad sobre los cepillos de dientes de Bambú

Todo lo que deberías saber antes de comprar uno

Si buscas una higiene dental libre de plástico, lo primero que debes saber es que la mayoría de los cepillos de dientes de bambú no son tan eco-friendly como piensas, tendrás que infórmate para elegir muy bien.

Hoy en día no es difícil encontrar un cepillo de dientes de bambú, sino conseguir que estos sean, más allá de un diseño bonito, realmente sostenibles, sin ningún tipo de impacto para nuestro planeta y los seres que habitan en ella. ¿Por qué?

El GreenWashing o “Lavado Verde” se ha acaparado de prácticamente todos los conceptos que sirven para diferenciar un producto ecológico y respetuoso con el medio ambiente de otros que no lo son.

La fuerza del marketing impulsado por el poder económico de grandes empresas, que emplean este tipo de desinformación en búsqueda de rentabilidad dificulta, cada vez más, la posibilidad de encontrar opciones naturales y, adoptar un estilo de vida saludable para las personas y el planeta.

GreenWashing
GreenWashing

Para encontrar un cepillo dental Zero Waste o “cero residuos” deberás ir más allá del mango fabricado en bambú. Tendrás que comprobar la composición de las cerdas, si estas son derivados o no del petróleo; preguntarte cuestiones como ¿Dónde se fabrican?, ¿Qué organismos les avala? o ¿De qué material está hecho su envoltorio? y, sobre todo, entender cada concepto para saber cuándo una marca es transparente al anunciarse y cuando no.

Y es precisamente sobre todas estas cuestiones de las que BioBambú, marca familiar española pionera en higiene dental Zero Waste (certificada, 100% biobasada), quiere enseñarte con este artículo.

Porque el conocimiento es sabiduría y nuestra misión es ayudar a liberar a los océanos de millones de toneladas de plástico, hablaremos sobre:

  • La composición de las cerdas de los cepillos de bambú.
  • Conocer las diferencias entre el Nylon sintético vs Nylon (poliamida) vegetal.
  • Distinguir lo biobasado de lo bioplástico.
  • Saber ¿qué es Biodegradable? y ¿qué es Compostable?
  • Mango de madera de bambú ¿Dónde se fabrican?

Tipos de cerdas en los cepillos de bambú

El primer paso antes de adquirir un sustituto al tradicional cepillo de dientes de plástico es comprobar de que están hechas sus cerdas, te sorprenderá saber que la inmensa mayoría están elaboradas con materiales derivados del petróleo (plástico) que no ayuda a reducir la huella ecológica o el impacto sobre el cambio climático, sino todo lo contrario.

La industria del plástico fabrica millones de toneladas de este material al año, lo que equivale por 4 en C02, según calculan los expertos. Y lo peor de todo, es que ciertas marcas están dando un paso más allá en su guerra comercial justificando que sus productos son plásticos o no veganos porque no hay alternativas, cuando en realidad sí que las hay. Vamos a aclarar conceptos y desmentir estas excusas.

Filamentos con Tynex, el plástico premium de los cepillos dentales.

El Tynex es “Nylon de alta calidad” y de “muy baja abrasividad” según las principales marcas de cepillos dentales de plástico, como Vitis o PHB asociado con una mejor higiene bucal, en comparación con las cerdas de poliéster, de cepillos corrientes. De allí a que ciertas marcas lo empleen como filamentos para sus cepillos hechos de bambú.

El problema de estas cerdas, es su composición, el plástico. No solo, no se degradan por sí solas, sino que tardan varios siglos en descomponerse y aunque se separen los filamentos del mango, para un correcto reciclaje, cuando llegan al final de su vida útil, tienen una alta probabilidad de acabar en el mar y convertirse en los peligrosos microplásticos.

El 79% de los residuos termina en vertederos y en el medio ambiente y según una información reciente, el 76,1% de la basura que producimos en España es plástica. Actualmente se arrojan al mar 126 toneladas de plástico cada día, a la espera de que salga adelante el Proyecto de Ley de Residuos, previsto en 2023.

Filamentos con Nylon, la gran mentira de los cepillos de bambú.

Si buscas introducir pequeños cambios para reducir el consumo de plástico, el Nylon no es una opción.

Este material, tal y como describe el diccionario es “poliamida sintética”, un tipo de plástico obtenido a partir de derivados de productos petrolíferos y aceites, desarrollado a partir de una investigación iniciada en 1928 aparentemente bajo el lema “Mejores cosas para una vida mejor a través de la química”, de la compañía Dupont y la antítesis del pensamiento Zero Waste.

Para conocer todos los detalles técnicos del Nylon sintético, pincha aquí.

Desde BioBambú revindicamos la falta de transparencia de ciertas marcas que, omiten información o cuentan aquella parte que les beneficia para no admitir abiertamente que no son una alternativa al plástico. Es el caso de algunas que emplean el Nylon 4 o 6, sin o con algún ingrediente vegetal como el carbón o el aceite de ricino.

Pero ¿Qué es el Nylon 4? ¿los cepillos con cerdas de Nylon 6 son más sostenibles?

Cerdas de los cepillos de dientes
Cerdas de los cepillos de dientes

Los diferentes tipos de Nylon se identifican por números 4, 6, 66, 69… Estos números se refieren a la estructura molecular del polímero o plástico y cada estructura tiene propiedades distintas. Los Nylon, 4 o 6, son plásticos de ingeniería muy comercializados producidos o generados a partir de derivados químicos del petróleo.

Si bien es cierto, estos Nylon están libres de bisfenol A (PBA) presentes en otros plásticos industriales que en la actualidad, y en concreto en la UE, está limitado su uso o prohibido por completo, en determinados productos y países, al ser catalogado como “sustancia tóxica y preocupante para la salud humana”. Sin embargo, estar libres de PBA ¡que está muy bien!, no les hace más sostenibles. Son y seguirán siendo plásticos sintéticos obtenidos del petróleo.

Ningún cepillo con estas cerdas podría desecharse al contenedor orgánico, por lo que si una marca no te advierte de ello no está siendo sincera, ni respetuosa con el medio ambiente.

El Nylon 4, está formado por un compuesto orgánico (2-pirrolidoma) que se produce industrialmente mediante el tratamiento de dos compuestos (gamma-butirolactona acuosa con amoníaco). Aunque se ha estudiado su desarrollo como una poliamida biodegradable y de base biológica, superior al Nylon 6, la realidad es que esta fibra en condiciones específicas, de tiempo y temperatura, podría llegar a degradarse entre un 30% y un 80%, que no es lo mismo que compostarse o biodegradarse.

Por su parte, el muy publicitado Nylon 6, es el más conocido de todos los plásticos técnicos, por sus propiedades y la posibilidad de ser modificado con aditivos, como es el caso de aquellos cepillos cuyas cerdas tienen algún ingrediente vegetal, sin sustituir el plástico de su base. Su fabricación depende del petróleo, por lo que no se le puede considerar un producto sostenible ni 0 Residuos.

Lo que nos lleva a las siguientes preguntas ¿Existe el Nylon Vegetal? ¿Cuál es la diferencia entre Nylon sintético y las cerdas naturales?

Diferencias entre el Nylon sintético Vs Cerdas naturales.

Diferencias entre filamentos naturales y sintéticos
Diferencias entre filamentos naturales y sintéticos

Partiendo de la base de que el Nylon es “poliamida sintética”, el Nylon vegetal no existe como tal. Lo que no quiere decir que no existan opciones Zero Waste.

Las poliamidas pueden encontrarse en la naturaleza, como la lana y la seda, y también pueden producirse filamentos a partir de materia prima natural, a base de plantas (Vegetales) o animal.

En este sentido, existen cepillos dentales con cerdas de jabalí o caballo. Opción 100% natural pero NO vegana. Una solución poco razonable si lo que se busca es proteger al entorno y su biodiversidad.

Distinguir lo Biobasado de lo Bioplástico

Como si ya no fuese lo suficientemente confuso el tema del Nylon, también se suman dos conceptos “Biobasado” y “Bioplástico”. Saber distinguirlos es clave para evitar caer en el #GreenWashing.

Los Bioplásticos, representan la apuesta en la promoción de nuevos materiales y productos compatibles con el medio ambiente e independientes de los combustibles fósiles.

En este sentido y según la Asociación Europea de Bioplásticos (European Biplastics), existen productos Biobasado procedentes de fuentes renovables (naturales), con las que, en este caso, se podría fabricar las cerdas de un cepillo de dientes 100% natural, sin petróleo ni compuestos químicos; y también Bioplásticos obtenidos mediante procesos químicos a partir de fuentes fósiles que son biodegradables en cumplimiento de las normativas de Biodegradabilidad y Compostabilidad.

Conviene aclarar que, la mayoría de productos Biobasados, procedentes de fuentes renovables, son biodegradables y compostables, aunque no precisan serlo. Mientras que los Bioplásticos, que tienen en su origen una fuente fósil, pueden llegar a serlo siempre que cumplan con los criterios científicos recogidos en las normas. Es decir, que se certifiquen como tal.

Filamentos naturales BioBambú.

La alternativa al plástico, son los filamentos Biobasados que ofrece BioBambú, Veganos y sin plásticos derivados del petróleo. Nuestros cepillos son el resultado de una búsqueda intensa para garantizar una higiene 100% Zero Waste.

Estas cerdas están elaboradas solo con plantas, concretamente con aceite de ricino procedente de las semillas de este vegetal. Un recurso natural prácticamente ilimitado para reducir la huella ecológica.

BioBambú, es la única empresa española avalada por USDA BioPreferred Program, que certifica que los filamentos son 100% de procedencia vegetal (Consulta certificación aquí).

Filamentos Biobambú
Filamentos BioBambú

Compostable y Biodegradable. El talón de Aquiles de los cepillos de bambú.

En el intento de dejar atrás el plástico, es fácil que las marcas presuman de tener productos Biodegradables y, ahora, cada vez más Compostable. Sin embargo, la cruda realidad es que sin pasar por un laboratorio y obtener una certificación que lo respalde, ningún producto, a ojos de las normas, puede ser 100% Biodegradable y/o Compostable.

Para los mortales, se entiende que un producto es Biodegradable, cuando se desintegra completamente y pasa a formar parte de la naturaleza; y Compostable, cuando lo hacemos a conciencia para generar <> o abono orgánico para las plantas de nuestro jardín; y para que todo esto ocurra, el producto debería ser lo más natural posible. ¿Verdad?

Lo cierto, es que es más complicado de lo que parece, y es allí, donde entran las normas. Según especifica AIMPLAS, para hablar de biodegradabilidad “se tiene que definir siempre el medio en el que se degrada el producto”, habiendo no una, sino varias normas en ese sentido, según se realice en suelo, Compost o de acuerdo a una temperatura. Además, explica que “se debe conseguir un 90% de biodegradación en un período igual o inferior a 180 días, a una temperatura de 58 ºC ± 2 ºC”.

Por otra parte, La Norma UNE-EN-13432 especifica los requisitos y procedimientos explícitos para determinar la compostabilidad del producto estudiando todas sus características: composición, biodegradabilidad, desintegración y hasta la calidad del Compost resultante. Por tanto, pese a describir un proceso natural, la realidad es que el “Compostaje” es un proceso hecho por el hombre.

Y es aquí, donde lo “Biodegradable” y “Compostable” se convierte en el punto débil de ciertas marcas que, a falta de certificación, debido al elevado coste que implica, describen la composición exacta de los productos en un intento de ser lo más transparente posibles para al menos realizar una gestión responsable de los residuos, otras, sin embargo, emplean estos términos con el único propósito de vender. Y ya, por último, están las empresas que certifican sus productos para garantizar la sostenibilidad de los mismos.

Además de la certificación USDA de sus filamentos, los cepillos de dientes BioBambú, poseen el sello FSC, de la organización Forest Stewardship Council, que garantiza que tanto la madera de bambú Moso de su mango, como el embalaje de todos sus productos, se abastecen de materiales que cumplen estrictas normas para proteger los bosques, animales y personas que dependen de ellos. Sus cajas son 100% Cartón Kraft, sin blanquear y sin pegamentos; y las tintas utilizadas, provienen de la soja.

FCS
FCS
Por lo que ya sabes, ¡Pide certificación oficial y no te dejes llevar por el “Biodegradable” o “Sostenible” solo porque el mango sea de madera! Y hablando de mangos…

Mango de madera de Bambú

A la madera de Bambú, se le podría considerar como un recurso natural, prácticamente “ilimitado” con la capacidad de salvar ecosistemas. Es una de las plantas más resistentes de nuestro planeta, producen hasta un 30% más de oxígeno que otras plantas, tiene su propio sistema anti-bacteriano natural, por lo que no requiere de pesticidas ni insecticidas para su cultivo y el Récord Mundial Guinness de la planta de más rápido crecimiento.

Puede crecer hasta 30 centímetros en un día alcanzando los 18 a 25 metros en pocos meses, mientras que un árbol común tarda 50 años en alcanzar su plenitud. Además, aunque se corten y colecten sus cañas, la planta madre continúa brotando nuevos tallos.

¿Dónde se fabrican los cepillos de dientes de Bambú?

La realidad es que actualmente no hay ningún cepillo de Bambú, cuyo mango se fabrique en España.

En el caso de BioBambú, empresa ubicada en Granada, los filamentos de sus cepillos 100% vegetales, fabricados en Europa y ensamblados en un cuerpo o mango de bambú Moso en el lugar de origen del Bambú, China (mayor productor del mundo). Un equipo de la marca garantiza la seguridad, la limpieza y las buenas condiciones laborales de los trabajadores, pero, además, sus productos están avalados por el exigente departamento de agricultura de Estados Unidos, a través del certificado USDA, convirtiéndose en el primer cepillo de dientes 100% biobasado de Europa. Libre de petroquímicos, sin gluten ni BPA.

Los mangos que respetan a los osos pandas

Por último, hay que destacar que pese a ser comestible, la variedad “Phyllostachys edulis”, conocida comúnmente como Bambú Moso, no es uno de los 42 tipos diferentes de Bambú de las cuales se alimentan los Osos Panda, por lo que además de sostenible no representan ningún riesgo para esta especie animal.

Ahora que, te hemos dado algún que otro argumento técnico para defenderte contra el GreenWashing, que sabes de sobra que no todos los cepillos de dientes de Bambú son respetuosos con la naturaleza, desde sus filamentos hasta el mango y, que las certificaciones importan, al ser una garantía sobre la sostenibilidad de los mismos, ¡Ya estás listo para dar al salto a una higiene dental libre de plástico!

Si es necesario, haz tus propias investigaciones, comprueba y súmate al movimiento Zero Waste con BioBambú.
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2 respuestas a «La verdad sobre los cepillos de dientes de Bambú»

  1. Hola, buenas noches
    Realiza distribución de sus productos a Perú?
    Me encantaría tenerlo en mi tienda de cosmética natural
    Gracias

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